Como Hermano se ha ido a vivir a Alemania con M. durante una temporada, yo he vuelto a mi casa de Chonilandia. Estoy muy contenta, porque aunque sea Chonilandia, ha sido mi barrio durante más de diez años. Conozco a la frutera, al pollero, a la mujer de la papelería, a la panadera, al monitor del gimnasio... Me gusta mi barrio, aunque sea feo, y me gusta mi casa. Es cómoda, es grande, tiene luz natural y... es mi casa, la echaba de menos.
Eso sí, con tanto cambio de casa hemos causado un pequeño problema de exceso de reservas. Hermano ha dejado aquí todas las cosas de cocina, M. trajo las de su piso de alquiler y yo aporté lo que tenía en mi piso Ikea. La unión de las reservas de tres casas ha traído como consecuencias que en mis armarios de la cocina se amontonen, entre otras cosas:
- Ocho kilos de macarrones.
- Catorce bayetas amarillas.
- Siete estropajos.
- Seis litros de suavizante.
- 360 metros de papel de aluminio.
Esta clase de amogollonamiento ya me había ocurrido antes, pero antes tenía ayuda para acabar con las existencias. Pero ahora estoy sola y no sé qué hacer con tanta cantidad de cosas. ¿Cuánto voy a tardar en comerme OCHO KILOS de macarrones? ¿Y que hago con el papel de aluminio? ¿forrar toda la casa? Por lo pronto, he pensado llevar regalitos cuando vaya de visita:
- Hola, Abuelo, ¿qué tal estás? ay, mira que estropajo más bonito te he traído.
...
- Hermanoooo... que te he mandado un paquete a Alemania. Sí, macarrones. Riquísimos, oye.
Hoy me voy a Barcelona, a ver a mi chico, y aún estoy pensando en meter un par de bayetas en la maleta.
Ferran Adriá inventaría una nueva receta...
ResponderEliminarPues seguro que mal no le vienen. Y además con bayetas de colores se pueden hacer unas manualidades preciosas ;)
ResponderEliminarLlevale macarrones que Barcelona es muy caro nena, y pasan por el aeropuerto o por el AVE :D
ResponderEliminarbuen viaje y mejor finde!
No hace falta forrar todo el piso, con hacerte un sombrero de papel de aluminio ya evitas las ondas de control mental de los satélites de la CIA.
ResponderEliminarPues seguro que le van bien ... Llévale también un par de kilos de macarrones, que a eso no le hace ascos nadie,jeje.
ResponderEliminarTako, ¿macarrón con aroma de papel de aluminio y acompañamiento de bayeta deconstruida?
ResponderEliminarEstrella, ¿en serio? es que tengo muy poca imaginación (y mucha torpeza).
Eva Luna, Lucía, como meta macarrones en mi bolso el glamour (ese del que ya ando escasa) caería miles de puntos, jaja.
E, Martin, :-O
Querida, ahí está tu solución a la crisis: forra los macarrones con papel de aluminio, de las balletas y estropajos haces cuerda y ya tienes unos collares de abalorios preciosos para vender por las ramblas de Barcelona.
ResponderEliminarOtra cosa sería forrarte tú de papel de aluminio y pegarte los macarrones, estropajos, balletas, etc y hacer de Mimo-estatua viviente.
Y unas perrillas que te sacas para que el finde te salga gratis.
Besos y pásatelo muy bien!
Fdo: Quelitas
Ya voy conociendo vuestro blog. Cada día un poco más. Es de lo más acogedor. Correis el riesgo de que me guste tanto que me quede a dormir definitivamente.
ResponderEliminarQuelitas, jajaja, no que los mimos no suelen traer buenas experiencias.
ResponderEliminarJuanra, jaja, quédate a dormir todas las veces que quieras. Besos.