Así llamaba yo a las gambas de pequeña. Carabitas. Me volvían loca. No tanto como las angulas a las que me invitaba mi abuela, claro, pero mucho. Luego los percebes y las ostras completaron el pódium, pero cuando era una enana el segundo lugar lo ocupaban las gambas sin lugar a dudas.
Los fines de semana íbamos a La Bilbaína a tomar el aperitivo, y mientras los mayores se tomaban sus cañas y yo me bebía muy despacito mi trinaranjus me iba poniendo morada con las gambas que me pelaba mi papá.
Cuando crecí aprendí a pelar las gambas, pero es algo que nunca me ha gustado. Las como, las cocino, y hasta sé pelarlas con tenedor y pala de pescado (cosa que me parece una horterada y sólo hago cuando es absolutamente imprescindible), pero odio pringarme las manos con caldito de marisco. Así que en las cenas de Navidad y cosas así mi padre ha seguido durante años pelándome las gambas: una para mí, una para él, una para mí, una para él…
Y ahora el Parkinson no le deja. Así que en Nochebuena me senté a su lado, y le partí el solomillo en trocitos, y le puse salsa por encima, y le serví el vino. Y pelé una gamba para él, una para mí, una para él, una para mí, una para él…
Las mejores gambas, pues. Animo, un besote
ResponderEliminarNiña... un besazo enorme.
ResponderEliminarHermoso...
ResponderEliminarNo hace falta que sea navidad para que sepamos que el mundo está lleno de gente buena. Felicidades, buena gente.
ResponderEliminar...y seguro que hasta conseguís que por un ratito tu padre se olvide de su enfermedad.
ResponderEliminarUn abrazo
Cabrona, casi se me escapa una lagrimita... toda mi reputación a tomar viento fresco. Un besote, animo y suerte, nena
ResponderEliminarBonito detalle!! Qué menos no??
ResponderEliminarSeguro que a él le hizo muchísima ilusión y no por las gambas.
Besazos, niña. :)
ResponderEliminarPrecioso... :)
ResponderEliminarJo, me he emocionado y todo... Abrazos fuertes...
Yo llevaba varios años pelando los langostinos a mi abuelo, uno para mi, otro para él, uno para mi, otro para el...
ResponderEliminarEste año solo para mi, no saben igual :(
Pero me ha encantado tu post ;)
Vaya, esta vez eres tú quien me ha emocionado.
ResponderEliminarY definitivamente las gambas están buenísimas.
Jo, se me han saltado las lágrimas... :(
ResponderEliminarAins. No sé, ni siquiera os conozco (os leo y alguna vez comento) pero me ha emocionado tanto... Y me he acordado de los sesos rebozados que taaaaaaaaaanto asco me daban pero que cocinaba igual porque eran para mi yayo.
ResponderEliminarEs lo que tienen las gambas. Solo se las pelas a alguien que te importa (y viceversa)
ResponderEliminarMucho ánimo para este 2009!!
besukis!!
Precioso, siempre es bueno tener a alguien cerca. Animo =)
ResponderEliminarEstoy de acuerdo con Sheena, uno sólo pela marisco para alguien que realmente quiere. Incluso yo lo hago y eso que odio gambas y langostinos.
ResponderEliminarUn besote :*****
Chicos y chicas, millones de gracias. Es increíble lo que hace la blogosfera, vuestros comments me han trasmitido algo que ultimamente me hace mucha falta. Besos para todos y seguid quedándoos a dormir.
ResponderEliminar¡Ah! Lily y Zoe, un beso especialmente fuerte para vosotras.
Así es el puto ciclo de la maldita vida. Pero sí, seguro que le han sabido a gloria. Mucho ánimo, niña.
ResponderEliminarMe he quedado sin palabras y sonriendo. Precioso post Be.
ResponderEliminarUn beso muy muy grande, uno para ti y uno para él.
Ana-ónima
Gracias guapines. Sois estupendos, todos.
ResponderEliminarLas gambas más ricas que hayas comido nunca, seguro. Y ojalá que las sigas pelando así muchos, muchos años más.
ResponderEliminarMe has emocionado con la historia, en serio.
No hay nada como la correspondencia y saber que hay alguien ahí para cuando tú no puedes...
ResponderEliminarJo, en el día de hoy ya me sentía super satisfecha, y tu post sigue en la misma línea... Mucho ánimo, seguro que tu padre engordó 20 kilos y no por las gambas sino por felicidad.
Un besote.
Gracias, chicos. Más besos.
ResponderEliminarUhhhhhhhhh que es Bueno lo que cuentas.
ResponderEliminarQue éste Fin de Amo sea Igual.
Increíble Be... uno de los mejores post que he leido.
ResponderEliminarTe deseo muuuuuchas navidades igual de felices.
Besos..
Hola!!!!!!!!!!!!1
ResponderEliminarQué bonito post!
Yo ahora baño a mi abuela, como ella me bañaba a mi cuando era niña, y me encanta poder hacer algo así por ella.
Creo además que la comida rica cuando te la hace/da alguien que te quiere sabe tan bien...Esta es la razón por la que mi zumo de naranja jamás estará tan rico como el que ella me hace.
Un beso.
Me has hecho llorar, es muy emocionante.
ResponderEliminarÁnimo Be, eres muy valiente.
Un besito y te deseo lo mejor para el 2009!
Chicos/as, anónimos, firmantes, conocidos, desconocidos, habituales y nuevos, gracias a todos. ¡Os merecéis tantas cosas buenas que Antoñita no va a saber por dónde empezar!
ResponderEliminarVaya cara que se les ha quedado a mis compañeras de trabajo cuando me han visto llorar, hasta que lo han leido también, has provocado una epidemia de lágrimas!!
ResponderEliminarDeseo que todos tengamos a quien pelar las gambas con todo ese cariño...
Os leo a menudo pero este es mi primer comentario, que post más emocionante, despues de leer los comentarios todavia me corren las lagrimas...
ResponderEliminarQue puedas compartir las gambas con tu padre por muchos años!
Muchos besos a todos, en especial a los que se han animado a commentar por primera vez. Chicos, nos encanta que os quedéis a dormir, sois lo mejor.
ResponderEliminarNo pensaba comentar tus obras completas... pero no me he podido resistir...
ResponderEliminarEres taaaaaaan mooooonaaaaaaa
Besos mil