MANAZAS

Yo, Be, me he cargado la plantilla milenaria de QaD por torpe y con un solo clic. Me autoflagelo ante mis copropietarias y me comprometo a dejarla lo más parecida posible, si no mejor. ¡Palabra!

miércoles, octubre 31, 2007

Before Halloween

Lo que más miedo me ha hecho pasar en mi vida fue esto:


El video musical de Thriller, de Michael Jackson. La versión completa, claro (que se puede encontrar aquí). Es el problema que tiene la empatía, que te metes en la historia pero bien. Lo vi una noche por la tele, tenía cinco años y casi me muero de pavor: yo era la chica de la falda de vuelo, y la de la cazadora remangada, y uno de los zombis... Me dió tanto pánico que cosas como ésta o ésta me hacen gracia pero aún me ponen un poco nerviosa.

El caso es que esta noche es Halloween y, aunque cuando he visto a todos esos niños disfrazados en las noticias de Antena3 (las ha puesto el Hombre Malo, a mí no me miren) me han dado ganas de pegarles con un bate de baseball, a mí no me vengan con el rollo de que es una americanada: cualquier motivo para ponerse una peluca merece mi apoyo total y sin reservas.

Para la fiesta me he buscado un disfraz rápido, fácil y con peluca. Voy a ir de...

La falda, las gafas y los zapatos (con menos plataforma, claro está) son míos. Me he comprado una camiseta naranja de cuello alto y en lugar de calcetines llevaré medias. Perro -Scooby- no hay, pero voy a customizar a Galactus, el gato del anfitrión.

Las fiestas de disfraces me molan mil, pero todos los años estoy tensa (PONI, PONI, PONIIIII!) hasta que compruebo que no hay ningún Michael Jackson con cazadora roja y lentillas amarillas. Pánico, en serio.

lunes, octubre 29, 2007

Enigma chino taytantos (V)

¡Nuevo enigma chino! Esta vez por cortesía de Morla ¡muchísimas gracias!

-Cartelería y rotulación Mari Jose.

- Hola. Necesito en tienda un neón, ¿lo pido ya?

- Sí, claro. Dígame qué quiere que ponga su cartel y deletreelo.

- Es fácil.

Un mes después...

- Y mila que lo dije clalo: locutolio: si hasta lo dije pol letlas: l-o-c-u-t-o-l-i-o. Esto españole no entelal de nada.

viernes, octubre 26, 2007

Los Chungos de Nuestra Vida: El Apocalipsis

Tras un corto periodo de descanso, los chungos vuelven a Quédate A Dormir. Hace unos días recibimos un email en nuestra dirección colectiva. Y cuando digo “hace unos días” quiero decir “hace semanas”. El caso es que hemos tardado tanto en publicarlo que la dirección que la autora del chungo nos facilitaba como de su blog ya no está operativa, impidiéndonos comprobar cuál es su nombre en Internet. Podríamos preguntárselo por correo electrónico, pero eso supondría un nuevo retraso en la publicación del chungo, así que llamaremos a la posteadora invitada “Mariposa” hasta que ella nos facilite un nuevo nick y quizá un nuevo link para su blog.

Y una vez explicado todo esto, disfruten de su chungo de hoy.

Mi chungo tiene nombre: Apocalipsis, y tiene varias fases, veréis.

Por definición, Apocalipsis tiene novia, sino, no sería Apo. Tiene una novia asfixiante y agobiante, de la que no se puede despegar. Una de esas novias a las que llama "Kari" (con K, importante) y Princesa. Y todo es tan idílicamente típico, que él está ahí tan cómodo pensando que eso es lo mejor que le puede pasar; a pesar de que constantemente dice que no es feliz, que está aburrido y agobiado, que necesita cambiar de vida.

De repente, un buen día, se da cuenta de que está enamorado de ti, y se le vuelve el mundo del revés. Adiós comodidad, hola rayaduras de cabeza!! Empieza con emails del tipo "eres lo único que me motiva para venir a la oficina", (en mi caso trabajábamos juntos), y acaba diciéndote que está enamorado de tí, pero quiere a su novia. Y claro, no sabe qué hacer y necesita tiempo.

Apo llora por las esquinas porque NO puede estar contigo, y no puede estar porque NO puede dejar a su novia, porque si lo hace ella se corta las venas y, ¿qué le dice entonces a sus padres? Apo siente que está dejando pasar el tren más importante de su vida, y te lo dice así, sin más miramientos. Porque es egoísta, y le da igual lo que la otra persona piense al escuchar tantos lamentos, tantos no puedo; cuando realmente, querer es poder.

No es tonto, y sabe que algo le gustas. Pero quiere que le firmes un contrato de permanencia, un contrato indefinido... y no, señores. Va a ser que no. Así que él no se arriesga, necesita garantías, que participes de la letra de su piso en Leganés, que comas paella con sus padres. Porque sino, él no puede-no puede.... (ahí pasa una fase Chiquito de la Calzada).

Así que cuando una se cansa de los lamentos y los quiero-pero-no-puedo, pasa a otra cosa-mariposa.

Y Apo entra en la fase Perro del Hortelano, es decir: cómo puedes hacerme esto, yo que lo habría dado todo por ti, yo que habría dejado mi perfecta vida por ti; y JUSTO cuando iba a hacerlo, vas tú y te lías con otro..... Pero yo quiero que quedemos, todavía estoy enamorado de ti, no salgas con él que no te merece, etc, etc.

Cuando por fin se da por vencido, te escribe una carta melancólica y melodramática, en la que asegura que eres la mujer más importante de su vida; y que nunca va a ser feliz. Se conforma con saludar las veces que coincidimos, y con mirar con cara de corderito. Cuando se bebe dos copas, mira en la distancia y mueve la cabeza tristemente.

Lo mejor de todo, es que en mi caso, no hubo sexo. Toda la "relación" fue platónica, a excepción de un par de besos una tarde que consiguió zafarse de su novia. Menos mal, si me lo llego a tirar, no quiero pensar qué hubiera sido de mi cabeza y de sus dilemas!!

Yo siempre he tenido claro que los compromisos no vienen por adelantado, que se generan con el tiempo, y que de los tíos así no hay que fiarse. Pueden ser unos psicópatas celosos, o dependientes emocionales que no te dejen ni ir a por tampax sola, o vete a saber. Es lo que me salvó.

Pero es un espécimen a mantener alejado cuando se está baja de defensas, porque puede llegar a confundir y a rayar si no te lo encuentras en el momento adecuado.

Moraleja: El que no arriesga, no gana (qué típico).

jueves, octubre 25, 2007

It’s virus time!

Éste es un post de servicio social de Quédate a Dormir mezclado con un poco de autoescarnio.

Es otoño… esa mágica época en que los catarros esperan a la vuelta de cualquier esquina. Pues encima de que es más fácil coger frío que escapar de la corriente, encima, los virus acechan también en Internet. Y, señores, a mí me ha pillado uno.

Pongamos que estás tranquilamente en tu radio, oficina o lo que sea, y se te abre una ventanita del msn de una amiga que te dice “mira que fotos más chulas” y te pasa un zip. Y tú como una tonta le das a aceptar.

Pero la foto no se abre, y en cambio el msn empieza a hacer cosas muy raras: temblar, parpadear, preguntarte si estás segura de querer hablar con Pepi si hace años que la bloqueaste (en idioma msn, claro)… Y entonces lo entiendes todo.

¡Te han pegado un virus!

Pues eso me pasó a mí ayer.

Primero quise morirme durante 5 segundos.. Luego flipé durante 30 más. Luego puse un mensaje en mi msn avisando a mis contactos de que no admitieran ningún zip de nadie. Y luego, como soy muy autónoma, pasé el antivirus intentando solucionarlo yo.

Como no encontraba nada, le pasé el panda on-line.

Como seguía sin funcionar, le pasé un antivirus con nombre de espía del Este que encontré por ahí, Kowalski o algo así.

Entonces todo decidió petar. El ordenador se declaró en huelga con una pantalla de color azul añil y yo pensé que igual era el momento de dejar de ser autónoma y llamar al servicio técnico.

Contestó ELLA: la informática borde. Le expliqué la situación y dijo que ahora subía. Le dije a Parker que ELLA venía para acá, y respondió con un “¡Qué miedo! No quiero verlo, me voy a pirar a casa media hora antes” . Mi ansiedad subió enteros. Parker se fue. ELLA llegó. A esas alturas yo ya tenía lágrimas en los ojos.

Y ELLA se enterneció: -Tranquila que no pasa nada. Mientras el disco duro no se queme podemos rescatar la información y meterle en otro equipo. Vamos a ver qué ha pasado.

Entonces miró al ordenador: -¿Qué es esto de Kowalski?

Y yo: -¿El qué?

Y ELLA: -Este antivirus de aquí.

Y yo: -Es que yo…

Y ELLA: -Claro, te has puesto a pasar antivirus como una loca y ahora se están zurrando entre ellos. ¿No sabes que sólo puede haber uno?

Y yo: -No, es que yo... snif-snif-snif... (Es otoño, estoy sensible con lo de la ola de pena y todo eso, ¡y ELLA da mucho miedo!)

Y ELLA: -Tranquila que no pasa nada, vamos a desinstalarlo… No te agobies que no es culpa tuya.

Se enterneció por segunda vez, señores: eso es un record histórico. Y mientras yo me debatía entre el “si tú supieras” y el “y yo cómo iba a saber que los antivirus eran como Los Inmortales, pero resultó que ELLA tenía razón: había 3 antivirus distintos al “oficial” instalados, uno de ellos dos veces. Si es que somos unos histéricos.

ELLA se fue, dejándome mucho más tranquila, confortada y habiendo evitado una bronca merecida. Pero claro, yo me siento mal.

Primero porque, por mi causa, se han infectado los ordenadores del corresponsal de mi radio en Londres y del corresponsal de otro medio muy importante en China. Y probablemente los de más gente.

Y segundo porque la titánica lucha de antivirus está solucionada, pero el virus sigue en el sistema haciendo de las suyas. Así que tengo la tarea pendiente de llamar esta tarde al informático friki para intentar averiguar qué es eso que se ha colado por el msn y el antivirus no localiza.

De momento, háganme caso y NO ADMITAN NADA EN ZIP QUE LES QUIERAN PASAR POR EL MSN con frases como “voy a subir esta foto de los dos a mi myspace” o “mira esta foto tuya con el pelo raro”. Y raro se te queda después, del susto. Ya les iré contando.

ACTUALIZACIÓN: Mi msn ha vuelto a mandar el virus a mis contactos con el mensaje: "Jamas me ha visto usted desnudo". Definitivamente, me voy a dedicar en exclusiva al gtalk por una temporada.

martes, octubre 23, 2007

De peluqueras y horrores

La boda de Elvisina fue el sábado. Con mi dilema del vestido, y visto que era imposible customizarlo como bien me sugería Irene Jansen (el vestío era demasiado estampado... demasiado particular), me pasé a la sugerencia Perli, que es una mujer sabia:
"cuando una se compra un vestido en una tienda donde más gente puede comprarlo, las comparaciones son inevitables. Por eso es IM-PRES-CIN-DI-BLE que:

-seas la mejor peinada,

-la mejor maquillada

-y lleves los mejores complementos."

Bien, armada con unos taconazos preciosos e intentando eso del maquillaje, decidí, además, ir a la peluquería. Pero tenía en mente este post de la Perri, que justo había leído unos días antes. Huí de Chonilandia para ir a una peluquería, intentando evitar cualquier rastro de genética maru. E intenté ser lo más clara y precisa en las instrucciones que le di a la peluquera, para establecer desde el principio las bases de nuestra relación:

- Quiero un mono o un semi-recogido discreto. Me da igual liso o con ondas suaves, pero por favor, que sea discreto y sin volumen, sin pelos disparados hacia los lados, sin cardados y, sobre todo, sin perifollos. Simple, sencillo y discreto, por favor.

Al acabar la parrafada me sentí un poco mal. No suelo ser demasiado tajante, ¿me habría pasado con la peluquera?

Pues no. Yo no veía qué estaba haciendo en la parte de atrás de mi cabeza (aún no tengo una mutación genética que me haya puesto un ojo en la coronilla) pero debí sospechar cuando todas sus compañeras pasaban y decían "Oh, María, qué bonito". Cuando levanté la vista del libro (vale, no, no voy a mentir: era el Hola con la boda de Bla y Bor) y me enseñó con un espejo lo que había hecho...

Donde yo dije "ondas suaves" ella entendió bucles.

Donde yo dije "sin pelos disparados hacia los lados" ella entendió que hacia los lados no, pero que hacia arriba sí.

Donde yo dije "sin perifollos" directamente no entendió nada.

Resumiendo: una cascada de bucles caía al modo Sissí por toda mi espalda, mientras una palmera de pelos salía de la parte alta mi cabeza, formando no sólo un perifollo peloso en toda regla, sino que además hacía que mi cabeza tuviera aura. Aura de pelos disparados, claro. Boquiabierta, al "¿te gusta?" todo ilusionado de María, le tuve que decir un NO y pedirle que, por favor, me deshiciera la palmera, que quería algo más discreto, con menos cardado y con menos... aura.

Llegadas a este punto, María se desconcertó. Obligada a deshacer su obra maestra de arte efímero, soltó la palmera y en menos de dos minutos me cogió con dos horquillas un poco los bucles (eso ya sí que no se podía deshacer) y pasó a mi flequillo. Pero el desprecio a su arte había hecho mella en su toque peluqueril y mi flequillo se le rebeló.

Me lo mojó. Me lo peinó a un lado. No le gustó.

Lo mojó. Lo peinó hacia delante. No le gustó.

Lo mojó. Lo peinó al otro lado. No le gustó.

Lo mojó. Lo peinó hacia arriba y lo cardó. Le pregunté si eso iba a quedar así, tan cardado. Me dijo que no.

Pero lo volvió a mojar. Al final, suspiró y dijo "¿lo dejo hacia adelante?". Y yo suspiré y le dije "sí, déjalo". Era eso o que mis pelos murieran de ahogamiento.

Llegué desconsolada a casa, con pinta de Sissí cutre, con mi paranoia acrecentada y con ganas de meter la cabeza bajo la ducha. Pero no había tiempo. Para arreglarlo, Hermano me dijo, en plan consuelo: "No, Hermana, no pareces Sissi... eres más bien tipo Shirley Temple".

Pero bueno, llegué a Toledo, me tranquilicé al escudriñar a todas las invitadas y ver que no repetíamos vestido. Me lo pasé genial, ignoré a mis bucles, ellos me ignoraron a mí...

Y a la mañana siguiente cuando me levanté ya no quedaba ni resto de Sissí, ni de la Temple. La que había aparecido en el espejo era ella:


Y es que el momento choni está ahí, acechándonme y atacando al primer descuido.

lunes, octubre 22, 2007

Hombres para la eternidad

Hombres-hombres, no “niños monos”. Ni “tíos buenos”. Ni siquiera “hombres guapos”, aunque lo sean. Éste es un top ten de machotes, de paradigmas de la virilidad, de hombres.

Porque hace tiempo que superé el síndrome Candy Candy y, aunque siempre me encantará Keanu –igual que Candy siempre recordará con cariño a Anthony–, ya no me van las nenas. Por eso, he preparado este rankin (cronológico) de 10 HOMBRES, de los que casi la mitad están muertos y los más jóvenes están a punto de cumplir los 40.

El espacio que le dedique a cada uno no implica que unos molen más que otros, es sólo un reflejo de mi grado de inspiración y/o cansancio.

No se trata de héroes testosterónicos, tiarrones musculíticos, cachas descerebrados ni tíos con pinta de pegar a las mujeres. Son hombres masculinos, y para eso no hacen falta kilos de fibra.

Todos son actores, pero los méritos para estar aquí son suyos, no de su personaje. Son ellos los que hacen que sus personajes destilen masculinidad, y no al revés. Mi novio dice que para cualquier mujer es un duro golpe darse cuenta de que Harrison Ford no es Han Solo. Lo mismo se aplica a Bruce Willis y John McClane. Han y John cabrían en esta lista; Harrison y Bruce, no.

Tampoco aparecen dos de mis hombres preferidos de todos los tiempos, Cary Grant y Colin Firth. Para nada son nenas, pero su principal característica es ser encantadores, elegantes e irresistibles… y no su arrolladora masculinidad, que es lo que aquí buscamos.

Y antes de que nadie proteste, no me gustan nada Rusell Crowe ni Marlon Brando, que entre otras cosas tienen pinta de oler mal, así que simplemente aquí no salen. Empecemos.

John Wayne

En mayo hubiera cumplido 100 años. Dicen que la noche antes de un rodaje intentaba dormir en un hotel de Las Vegas, en la suite justo encima de la de Frank Sinatra... que daba una fiesta. El ruido no le dejaba dormir, y cada vez que llamaba por teléfono para quejarse el volumen bajaba unos minutos para volver casi más fuerte. El caso es que Wayne apareció en la suite para pedir que dejaran de hacer ruido y uno de los enormes guardaespaldas le dijo: “Nadie habla así al sr. Sinatra”. John se dio la vuelta y le pegó un porrazo que lo tiró al suelo, y una vez allí le rompió una silla en la cabeza. El ruido paró, claro.

Entre sus pelis, El Hombre Tranquilo (con esa cama rota “a la mañana siguiente”… con esa superescena en la que lleva a rastras a Maureen O’Hara… con ese superbesazo en la lluvia ¡y la camisa blanca empapada!…) y Hatari! (una delicia donde caza en África animales para zoos mientras enamora a la fotógrafa Dallas con elefantes al son de una cancioncita de Henry Mancini.


Burt Lancaster

Tres imágenes. 1: El beso en la playa en De aquí a la eternidad que ilustra el post anterior. 2: La divertidísima El temible burlón, no pierde ni gota de atractivo vestido de pirata con mallas. ¡Y esos saltos los daba solito! 3: De uniforme unos ratos y en la bañera otras en La batalla de las colinas del whisky, que es mi western favorito.

Yul Brinner

El hombre calvo más sexi del mundo. Sexi sometiendo al pueblo de Israel en Los 10 mandamientos. Musicalmente sexi en El Rey y yo. Y más sexi aún en Anastasia (bien hecho, nena, yo también hubiera pasado de la pasta de los zares rusos). El pelo es supérfluo.

Gregory Peck

Me en-can-ta. Es el amnésico misterioso de Recuerda, el intrépido y despistado profesor de Arabesco, el periodista de la Vespa de Vacaciones en Roma, el hombre perfecto de Matar a un Ruiseñor (Atticus Finch, ese abogado sin tacha al que Scout leía el periódico y que no tenía arma pero era sin discusión el mejor tirador de la región).

Sean Connery

Ya de joven tenía cualidades, pero el puesto en esta lista se lo ha ganado con los años. Ha sido Ricardo Corazón de León, el Rey Arturo, el padre de Indiana Jones, Juan Sánchez Villa-Lobos Ramírez, Guillermo de Baskerville, Robin Hood, James Bond, O’Niel… En fin, ‘nuff said.

Clint Eastwood

Impecable. Indiscutible. ¡Es el Sargento de Hierro, el Jinete Pálido, Harry el Sucio! ¿Qué puede ser más manly que eso? Dirigiendo ha demostrado que, además de machote, tiene mucho que decir, incluso en la lacrimógena Los puentes de Madison, donde su pequeño corazón sexagenario se enterneció (aunque yo personalmente podría haber vivido sin Mystic River). Y además sabe cantar.

Alan Rickman

No puedo seguir citando filmografía como loca, con él no sabría dónde parar. Digamos que su voz es increíble; que igual hace Shakespeare, que la Jungla de Cristal, que Harry Potter; que su machosidad sobrevive a una adaptación ñoña de Jane Austen; y que ni de metatrón con genitales a lo Ken pierde esa carga sexual a la irlandesa.

Ciaran Hinds

Se pronuncia /kiaran jainds/ (más o menos). Aunque para el gran público es Julio César de la serie Roma, para mí siempre será el Capitán Wentworth de la versión de Persuasión de la BBC. En su caso no es que su machosidad sobreviva a Jane Austen, es que se come la pantalla. Salió en Excalibur. Y además es irlandés.

Viggo Mortensen

Es el mejor reividicando a los hombres sucios, pero de esos que dan la impresión de que huelen bien hasta volviendo de la guerra de Flandes, con barro hasta las cejas en la Tierra Media o en mitad de una carrera a caballo por el desierto. Escribe poesía, pinta, es fotógrafo, habla 6 idiomas y cuida caballo, y todo esto sin parecer un pedante pretencioso y blandito. Y además está la pelea de la sauna en Promesas del Este.

Hugh Jackman

El único de los hombres del celuloide actual que puede cantar y bailar en Oklahoma! sin que eso entre en conflicto con la tremenda masculinidad que necesita para hacer de Lobezno. Y además lo hace genial. Y si habéis visto Scoop no tengo que decir más.

Venga, niños y niñas, ¿a quién me he olvidado?

(Para la próxima, “Guapos de leyenda”)

viernes, octubre 19, 2007

Para la eternidad

- ¡No sabía que pudiera ser así! Nadie me ha besado nunca como tú.
- ¿Nadie?
- No, nadie.
- ¿Ni uno? ¿De todos los hombres que te han besado?
- Tendría que hacer memoria. ¿Cuántos crees que han sido?
- No lo sé. ¿Me das un cálculo aproximado?
- No sin calculadora. ¿Tienes una?
- Olvidé traerla.
La primera vez que vi este diálogo entre Karen Holmes y el sargento Milton Warden estaba escrito en “El Muro” de Ragazza. Inmediatamente lo recorté, junto con esta foto, para forrar mi carpeta de aquel curso.

¿Nadie va a preguntar si es Karr o Kerr?

jueves, octubre 18, 2007

La serendipia acecha (cuando menos te lo esperas)

Tras una semana más o menos aguantando el teclado chapapótico, por fin ayer me decidí a exponer aquí mi problemática. Y precisamente ayer… ayer…

¡Es nueeeevo! Mirad, aún tiene puesto el plastiquito…

Y es sólo mío (bueno, y de quien sea el cerdo que usa mi ordenador por las mañanas). Estoy emocionada. En serio.

A primera hora de la tarde vino un informático jovencito y pelín friki a hacernos a mi compi Parker y a mí un trasvase de archivos de un usuario a otro (¿he dicho ya que... jijiji... aquí... jijiji... no trabajamos en red?). Cuando se fue, Parker y yo nos pusimos a trabajar con toda la alegría que nos permite nuestro güindous 2000 (no mucha), para descubrir a la hora de imprimir los guiones que no teníamos configurada ninguna impresora.

A minutos de empezar el programa eso significa pánico nuclear.

El informático friki ya no estaba, así que cuando llamamos al servicio técnico para pedir ayuda urgente llegó otro, uno nuevo, bueno, nuevo no, uno canoso, a lomos de un imaginario caballo blanco, que rápidamente nos configuró tres impresoras a cada una.

Sólo con eso ya se hubiera ganado nuestro amor eterno, pero no contento con ello echó un vistazo a nuestros equipos, se fue y volvió a los 10 minutos con un ratón nuevo para Parker y ¡un teclado nuevo para mí!

Y lo que más ilu me hizo es que el informático canoso sabía exactamente cuál era el sitio del teclado m*erdoso. Éste:


¡¡Yupi!!

miércoles, octubre 17, 2007

La m*erda acecha (donde menos te lo esperas)

Aviso!!! Post no apto para estómagos sensibles!!!

Me han cambiado de ordenador. Ha habido una reestructuración en la redacción por la cual han reubicado a todo mi programa en unos ordenadores de “Informativos” que están desocupados por las tardes. Desde ese día deberían pagarnos un plus por riesgo laboral.

Tras el arrrrrrrrrrduo proceso de trasladar los datos de un ordenador a otro (porque... jijiji... en esta radio no se trabaja en red... jijiji... llevo casi tres años aquí y aún... jijiji... me sigue dando la risa), me encontré con el siguiente panorama.

Es mugre, señores, roña pegada y tropezones de porquería incrustada entre las teclas. Vean otra muestra:

¡Son trozos de algo que una vez pudo ser comida! ¡¡¡Esto es orgánico y seguro que atrae bichos!!! El espíritu de Mónica Geller Bing se apoderó de mí y pensé en comprar bastoncitos y liquidito limpiador y dedicar la jornada entera de trabajo del día siguiente en limpiar el p*to teclado y que las noticias las diera Rita. Hice una miniprueba del algodón (o de la esquinita del clínex), y éste fue el resultado:

Tras lo cual Mónica coincidió conmigo en que lo ideal era tirar el chisme por la ventana. Aún así, nos contuvimos, tentamos a la suerte y dimos la vuelta al teclado radiactivo. Y lo agitamos, a ver qué pasaba. Esto es lo que ocurrió:

Cayeron cosas. Pelos. Trozos de algo. Consideré vomitar encima para aportar yo también mi granito de arena…

No, en serio, miradlo bien. Debe de haber lo menos medio bocata de tortilla:

El caso es que sigo currando con ese teclado, que tras la operación tiene -así a ojo- como medio kilo menos de m*erda, pero sigue asqueroso... Lo miro lo menos posible para no pensar en ello, pero no sé si venir a trabajar con guantes o coger la baja por depresión, porque esto, ni con pirulillas.

Por lo menos deberían vacunarnos contra el tifus. Por seguridad.

martes, octubre 16, 2007

Magia

A pesar de las épocas horrorosas, a veces mi trabajo tiene cosas geniales.

Tuve que buscar un mago para organizar un taller de magia para niños, cosa que me costó bastante, pero finalmente encontré a Antonio. Antonio es un hombre de unos cincuenta años que abandonó su Málaga natal y su profesión (era periodista) para venirse a Madrid y probar fortuna como escritor y como mago. Tiene los ojos azules, cara dulce y aire desamparado y un poco despistado. En principio yo había pensado en alguien más joven y activo, pero cuando se le iluminó la cara y sacó el entusiasmo para hablar de sus proyectos no me quedó duda de que era perfecto para el trabajo.

Cada semana me manda un mail para contarme qué han hecho en el taller y para pedirme el listado de material. Como son cosas simples, las compro y se las acerco yo misma al centro. El otro día tenía un listado largo: purpurina de colores, 10 barajas de cartas, 20 cartulinas, cordel fino, rotuladores, clips... en la primera tienda lo encontré todo, menos los 20 lápices sin punta. Me fui a otra y a otra y nada. En la cuarta encontré los lápices sin punta, pero tenían una goma en uno de los extremos y le llamé para saber si le servían:

- Antonio, estoy en la tienda comprándote el material y no he encontrado los lápices sin punta simples, sólo unos que aún no tienen la punta pero que tienen en el otro extremo una goma de borrar: ¿te sirven?

- Sí, me valen. Es que son para hacer las varitas mágicas.

Y, jo, seré una tonta, pero se me pusieron los pelillos de punta de la emoción. Que una ha leído muchos libros sobre magos y sabe lo importante que es la varita. Me sentí como la proveedora de Ollivander´s, por lo menos. Salí de la tienda feliz y con el brazo agarrando con fuerza el bolso, que no todos los días lleva una un cargamento tan valioso.

lunes, octubre 15, 2007

De cuando la familia da mucho susto

El viernes fue el santo de una de las hermanas de mi madre y tuve que hacer acto de presencia. Mi madre pretendía que aquel día fuera la presentación en sociedad de mi Amó, una barbaridad a la que yo me negué en un primer momento.

Luego ella empezó en plan: “Hija, son las únicas hermanas que me quedan”. Y yo: “Sí, mamá, pero son unas pesadas”. Y ella: “Porque son mayores, pero son muy buenas personas”. Y yo: “Mamá, van a empezar a hablar de don Modesto (su cura de cabecera, recientemente fallecido) y de Federico (sí, ése), y mi novio no está ni bautizado”. Y ella: “Pues que les siga la corriente”. Y yo: “Mamá, nos van a preguntar que cuando nos casamos y me dará un ataque de nervios”. Y ella: “Que va, hija, ya verás como no… ¡es que me hace una ilusión!”. Y claro, se lo propuse.

Menos mal que dijo que “ni loco” (al final me esperó con unos amigos en una cafetería a tres manzanas). En fin, que fui yo sola. Menos mal. ¡Menos mal!

Pongámonos en situación: mi padre, mis hermanas y tres señoras de Huesca de mediana edad celebrando el día del Pilar. Cuando yo llegué las tres oscenses ya iban un pelín pedo.

Padre: -Hola hija.
Hermanas: -¡Hola, Be!
Tía Soltera 1: -¡Qué guapa vienes!
Tía Soltera 2: -¡Pero qué guapa!
Madre: -Ven aquí y besa a tu madre.

Besé a todo el mundo y me sentaron entre mi madre y la más pedo de sus dos hermanas mayores solteras. Según me siento…

TS1: -¿Qué tal, Be?
YO: -Muy bien, tía.
TS2: -¿Y qué tal tu novio?
YO: -Pues muy bien.
TS1: -¿Cuándo os casáis?
YO: -Tía… pues no sé si nos casaremos, en fin, es pronto.
TS2: -¿Pero es majo?
YO: -Sí, es muy majo.
TS1: -¿Y estás a gusto?
YO: Sí, estoy muy a gusto.
TS2: -Pues eso es lo importante.

Entonces mi madre decidió comprobar si desde que cumplí los 30 se me ha caído el culo, para lo cual metió su mano por debajo de mi falda y me pegó un pellizco.

YO: -Mamá, para, anda.
M: -Soy tu madre y toco porque puedo.
YO: -Vale.

Fue como provocarla: por un lado es mi madre y toca porque puede, y por otro no estaba mi perro y para mí que lo echaba de menos, porque aquello era rarísimo. Mi madre, ¡¡la mujer que odia que la toquen!!

YO: -Mamá, en serio, para.
M: -Que te calles.

Yo me callé –por el momento–, pero mis tías no.

TS2: -Qué mal carácter tienes a veces, con lo dulce que tú eres.
TS1: -¿Dónde has dejado a tu novio?
YO: -En una cena…
TS2: -¿Y cómo es?
YO: -Es… ((¿ateo y anticlerical?)) Muy majo.
TS1: -¿Y qué tal con él?
YO: -Pues muy bien, tía.
TS2: -¿Habéis pensado en casaros?
YO: -Pues no, tía, aún no hemos pensado en eso. Es un poco pronto.
TS1: -¿Pero es majo?
YO: -Sí, tía, es muy majo.
TS2: -¿Y estás a gusto?
YO: -Sí, estoy muy a gusto.
TS1: -Pues eso es lo importante.

Y mi madre seguía a lo suyo.

YO: -Mamá, deja de meterme mano.
M: -Ay, hija, de verdad, cómo eres.
YO: -En serio, para ya.
M: -Calla y come.

Mi Tía Soltera número 1 introduce un nuevo tema de conversación.

TS1: -Con lo dulce que eres y el mal carácter que tienes a veces… ¿Has leído el libro del Papa?
YO: -(Flipo) No…
TS1: -Pues es precioso. Te lo tienes que leer.
YO: -(Sigo flipando, pero algo se me ocurre) Pero yo he leído que el Papa advertía que no era un libro para todos los públicos…
TS1: -Yo estoy impresionada por el prólogo, qué cosa tan bonita…
YO: -Lo leí en algún sitio… Decía que la gente no se lo comprara pensando que era un libro sobre la figura de Cristo, que se trata de un escrito teológico sobre la santidad de nosequé cosas…
TS1: -Pues el prólogo es una maravilla. Da las gracias, y habla de todas las personas que han tratado esos temas antes… de Pappini, de… Te lo tienes que leer.
YO: -No suelo leer ese tipo de libros, la verdad…
TS1: -¡Pero si el prólogo es una preciosidad!
YO: -Ya tía, pero si no consigo pasar del prólogo de poco me va a servir…
TS1: -Pues a mí me tiene maravillada. Aunque me quede en el segundo capítulo.
YO: -Tía Soltera número 2, ¡pero qué ricas están las croquetas! Buenísimas…

Sí, intenté desviar la conversación a la comida, pero no sirvió de nada.

TS2: -Pues luego te llevas unas cuantas y que las pruebe tu novio… ¿Qué tal es?
YO: -Pues muy majo.
TS2: -¿Le gusta comer?
YO: -Sí, tía.
TS1: -¿Es goloso?
YO: -Bueno, menos que yo, pero sí.
TS2: -¿Y para cuando lo de casaros?
YO: -(Dioooooooooooos, menos mal que no ha venidooooooo) Pues aún no lo hemos pensado.
TS1: -¿Pero estás a gusto?

YO: Sí, tía, mucho.
TS1: -Pues eso es lo importante.

Decidí probar hablando de libros que no fueran el del Papa y le pregunté a mi padre si le gustaron los últimos que le presté. Mi madre, que pasa del Papa, se había puesto ya a acompañar la jota que sonaba: La Magallonera.

M: -Pulidaaaaaaa… magalloneeeeeeeraaaaaaa…
YO: -Papá, ¿te has terminado “El Caso Jane Eyre”?
P: -Sí, claro, ahora estoy con el de “Las Ovejas de Glenkill”.
TS1: -¿Te has leído el que te regalamos por tu cumpleaños?
YO: -¿El de Paolo Coelho? Er... aún no.
M: - Andaaaaaaaa y dileaaaaaaaaaaaaaaal Santo Cristoooooooooooooo…
P: - Pero creo que el que más me ha gustado de los tres es el de “La Pesca del Salmón en Yemen”.
YO: -Sabía que ése te iba a encantar. Es que es-
TS1: -¿Habéis leído “El Último Encuentro”?
YO: -No… ¡Sí! El de Sándor Márai… Me lo regalaron por Navidad.
M: -Pulidaaaaaaaaaaaaa… magalloneeeeeraaaaa…..
TS1: -¿A que es precioso?
YO: -Sí, un poco triste el final. Los personajes están todos tan solos…
TS1: -Claro, es que el autor se suicidó y se nota en la historia. Anda, come un poco de queso con salsa de mermelada.
YO: -Gracias… Bueno, es que están básicamente esperando la muerte.
M: -Que cuandoooooooooooooo me llame al cieloooooooooooooo…
P: -Pues ése no me lo prestes, ¿eh?
TS2: -Es precioso, precioso. Lo que pasa es que se nota que el autor se suicidó, y por eso.
TS1: -¿Y quién te regaló el libro?
YO: -…mi novio…
TS1: -¿Y qué tal? ¿Es majo?
YO: -La verdad que sí, tía.
TS2: -¿Y pensáis casaros?
YO: -Tía… pues no lo sé… pero estoy muy a gusto. Y eso es lo importante, ¿no crees?
TS2: -Claro que sí, hija, claro que sí. A ver cuándo nos lo traes.
M: -Que me caaaaaaaaaaaaaannnnten la oliveraaaaaaaaaaa….

Se acaba la canción y ella vuelve a tocarme la pierna.

YO: -Mamá, deja de meterme mano.
M: -Ay, hija, de verdad, cómo eres.
YO: -En serio, para ya.
TS1: -Ay, Be, con lo que a mí me gustaría tener aquí a mi madre, que está muerta, y me tocara así.
YO: -(Visualizando a mi abuela volviendo de la tumba para sobar la pierna de mi tía) Si quieres te presto a la mía.
TS1: -Es que no es lo mismo.
YO: -Vale. Mamá, ¿quieres que me quite el vestido para que te sea más fácil?
TS2: -Ay, Be, qué mal carácter tienes, con lo dulce que tú eres siempre…
YO: -Ya…
TS1: -¿Y tu novio qué tal es? ¿Es cariñoso?
YO: -Pues sí… Tía, que buenísimo está esto, ¿cómo lo haces?

Mi Tía Soltera número 2 trae una cesta llena de chaquetitas de bebé que hace para la parroquia.

TS2: -Mira que cosa tan bonita…
YO: -¡Qué monada! Qué pequeño, tía, tiene que ser dificilísimo.
TS2: -No, bueno, depende del punto.
TS1: -A ver si te casas y te hacemos jerseicitos para ti.
YO: -Bueno, tía, aún no entra en mis planes. Mamá, en serio, deja de meterme mano, por favor.
TS1: -Be, con lo que me gustaría a mí tener a mi madre, que está muerta, y que me tocara o lo que ella quisiera. ¡Con lo dulce que tú eres...!

Y así to-da-la-no-che. Y cuando me fui, me metieron mano las tres. Menos mal que no vino mi novio.

Bueno, son familia. Y ya pasó. Y eso es lo importante. En fin, que viva la Virgen del Pilar.

jueves, octubre 11, 2007

El vestío de la boa

Lo sé: este post no va a ser comprendido por la inmensa mayoría de lectores masculinos y por buena parte de lectoras femeninas. Pero es que necesito escribirlo, a ver si exorcizo mi preocupación (estúpida, lo sé, pero que está ahí, en plan run-run).


Ya os comenté que pronto se casa mi amiga Elvisina. Como siempre, lo del vestido para la boda me trae de cabeza. Y no, no es que no haya encontrado nada. No van por ahí los tiros.

Ando un poco justa de dinero y mi madre, que es maravillosa, se ofreció a regalarme el vestido para la boda. Yo encantada, aunque eso supuso que lo tuvimos que comprar a toda prisa en Palma y con un presupuesto ajustadito (no era cuestión de abusar). Resultado: en septiembre me compré un precioso vestido, pero en una de esas tiendas que están por todas partes. ¡Error! ahora no paro de imaginar lo peor:

¡que otra chica en la boda lleve el mismo vestido que yo!

No, miento, sería peor que

¡dos chicas más en la boda llevaran lo mismo que yo!

No, no, en realidad lo peor de lo peor sería que

¡la nueva novia de ese ex-novio mío que pululará por la boda lleve el mismo vestido que yo!

Sé que es una estupidez, pero me tiene preocupada lo del dichoso vestido. Ya he soñado tres veces con el puñetero, en diferentes variantes (que me lo dejaba olvidado en Madrid, que se me ensuciaba, que lo estrenaba antes de tiempo con una chaqueta cutre y se me llenaba de tierra). Jo. Estoy deseando llegar al banquete y confirmar los temores o desecharlos, porque me siento muy estúpida cada vez que abro el armario y me imagino que el vestido me mira burlón, ahí, tan a gustico en su percha mientras yo me remuevo inquieta. Y menos mal que es pronto la boda, porque con la manía que le estoy cogiendo, en un par más de semanas habría acabado ardiendo el maldito en una pira anti-vestidosparanoia.

martes, octubre 09, 2007

Agobio mortal

Llevo un mes currando demasiado. "Demasiado" significa entrar en la oficina a las nueve de la mañana y salir a las once de la noche, e ir los domingos también. Después de que mi querido sucesor dimitiera me cayó encima su trabajo, el mío y un poquito más de propina. No le puedo culpar, ha sido el más listo de mi oficina, aunque yo haya sufrido las consecuencias. Me ha caído todo un montón de curro encima de más y... bueno, unos lo llaman aprovechar los recursos disponibles, otros lo llaman esclavitud y yo lo llamo imbecilidad por mi parte por aguantarlo. En fin.
En pleno estrés, con un agobio mortal, ya no pude más y fui a mi jefe:
- Jefe, necesito ayuda.
- Tienes razón.- y salió disparado hacia la calle. Yo me quedé sorprendida, porque no tenía yo idea de que los procesos de selección se iniciaran por las esquinas (al menos en mi empresa), pero más sorprendida me quedé cuando llegó con una bolsita pequeña de farmacia: ahí no cabía un sustituto en condiciones, ¡ni siquiera cabía willow!
- Toma ayuda: LEOTÓN. Fantástica mezcla de jalea real y gingseng. Hala, tómate una pirulilla y sigue trabajando.
Así, dopados y a lo loco, seguimos currando. Cuando cundía el desánimo, mi jefe gritaba: "¡Qué rulen las pirulillas!" y continuábamos con el doping a go-gó. Nos cogen los del tour de Francia por banda y nos caemos con todo el equipo...
Cuando ya nos planteábamos ponernos un catre al lado del ordenador, por eso de no perder el tiempo desplazándonos a dormir a casa, las cosas se están calmando. Pero aún me dura el cansancio, la insoportabilidad y el monotema (¿de qué puedes hablar y con qué puedes soñar, aparte del trabajo, si vives en la oficina?). Sigo haciendo horas extras, pero al menos cuando salgo, las luces del puti de al lado de mi oficina aún no están encendidas ni sus ocupantes a pleno rendimiento.

lunes, octubre 08, 2007

El día que hicimos pis en Radio 3

Primero voy yo con mi percepción de la cosa para luego ir completando entre todos –la noche anterior había dormido poco y hay cosas que recuerdo en nebulosa–. Haced vuestras aportaciones (los que lo escucharais) y vuestras preguntas (los que no) en los comments, ¿vale? Vamos allá.

Llegadas
Todo empezó a las nueve y cuarto, con un coche de Radio Nacional de España en la puerta de mi casa y yo pensando “cómo molo”. A los diez minutos estábamos en casa de La Perri que casi seguro pensó algo parecido, y al rato llegamos a Prado del Rey.

Nos recibió César, el productor del programa y lector de éste vuestro blog y nos llevó a la redacción de Radio 3, ese templo del rock, la modernidad y el guaismo. Nos pusimos a imprimir posts.

A eso llego Misi a lomos de Bichito y nos dirigimos al estudio (enorme: al lado de eso, mi radio parece de pin y pon).

Juan Pablo Silvestre, el director del programa, llegó a menos tres minutos de empezar el programa, vestido de negro de pies a cabeza y, bajo la camisa negra abierta, una camiseta con pentagramas.

-¿Queréis beber algo?
-¡Agua!
-¡Agua!
-¡Agua!

Nervios
El agua ayudaba con los nervios. A mí se me pasaron según se encendió la luz roja de “en el aire”. A la Perri más o menos, y a Misi tampoco, porque se le puso voz de niña superbuena a la que apetece acunar.

Aún así, no me acuerdo de qué música sonó. Hum. Igual sí que estaba nerviosa.

Bloggers
Comenzó el programa con un “Hola, somos Be, Misia y Perri de QuedateADormir y esto es Red Babel”. También estaban Víctor, surfeando la blogosfera mientras tanto, Khalo de Dadanoias, Miguel Ángel Lama de Pura Tura y Rubén, el Capitán Lillo (por cierto que no se lo dijimos pero qué voz tan bonita, qué mono es el acento aragonés cuando es mono). Todos bloggers.

Y es que los blogs eran el tema del programa. Nadie los llamó “bitácoras”, pero sí “blocs”, “blofs”, “blós” y hasta “globs”… Jijiji, cosas del directo.

Carteles
¡Nos sentaron separadas! Misi y yo estábamos juntas pero La Perri estaba solita al otro lado de la mesa. Nos comunicábamos por escrito. No con notitas: carteles en folios. Ejemplos (no son gritos, son mayúsculas):

“JO, ESTOY AISLADA”
“¡¡¡TE QUEREMOS, PERRI!!!”
“¿QUÉ TROZO LEO? ¿ÉSTE? ((flecha))”
“SÍ, ÉSE MOLA”
“¿QUÉ TAL LO HE HECHO?”

“SUPERBIEN!”
“TÍA, SE ME HA OLVIDADO EL NOMBRE DEL LOCUTOR!!! ¿CÓMO ERA?”
“NO ME ACUERDO!!!”
“¿DE QUÉ ME SUENA EL TÉCNICO?”

“NO SÉ, PERO A MÍ ME SUENA MOGOLLÓN TAMBIÉN”
“¿ACABAS DE DECIRLE A KHALO QUE NUESTROS LECTORES TIENEN CALIDAD Y LOS SUYOS SON UNOS PAJILLEROS?”

“¡NO! ¿VERDAD QUE NO?”
“¡¡TÚ ACABAS DE DECIRLE QUE SI LE GUSTA CHUPAS P***AS!!”

“¡QUÉ VA! ¿SÍ?”
“¡SON LOS NERVIOS!”
“¿NO PARECE COMO SI SÓLO HABLÁRAMOS DE SEXO?”
“PUES A LA MIERDA LAS NAVIDADES BLANCAS…”
“ME HAGO PIS…”
“Y YO…”
“¡¡Y YO!!”

Futuro cursillo
Juan Pablo nos preguntó sobre Bob Dylan, y le dijimos que nos gustaba más su hijo, ese gran “one hit wonderful”. No sé si por eso o por otra razón, ha prometido mandarnos un curso de música en forma de canción. (Si mola lo colgaremos).

Pis
Y nos hacíamos pis. Y el programa dura 2 horas SIN PAUSAS. Y claro, no dejamos charquitos en el estudio, pero casi. Yo me removía en el asiento, la Perri estaba sentada en su silla al estilo indio, Misi estaban muy muy concentrada…

Después del programa Juan Pablo nos escoltó hasta los baños, porque la casa de la Radio es como la facultad de Periodismo de la Complu pero a lo bestia.

Allí La Perri y Misia batieron sus records personales con prácticamente 4 minutos de pis continuo sin parar. A mí me tocó esperar a que alguna de mis dos compañeras de blog saliera y me cediera su lugar para hacer lo propio.

Fotos
Juan Pablo nos esperó caballerosamente en la puerta. Después nos hicimos fotos. Misi asegura que Juan Pablo casi le toca una teta posando (por azar). Yo reconozco que le toqué el culo, pero os juro que fue un accidente las dos veces.

SMS
Todo terminó con un sms que decía "¡Sois chachis!" y otro que decía "¡Estratosféricas!". Nuestros amigos nos quieren.

Puntualización:
El Día Internacional de la Lavadora es una iniciativa de Lorzagirl que Quédate A Dormir apoya y promueve, pero la idea original es de Lorz y sólo de Lorz. Que por cierto es, junto con La Perri, mi bloguera favorita.

viernes, octubre 05, 2007

Will PÁNICO kill the Radio Stars?

Lo único que se nos ocurre es: “Qué raro es todo”.

Pero habrá que esforzarse y contar la historia desde el principio.

Ya sabéis que tenemos una dirección de correo electrónico (quedateadormir@gmail.com) donde nos encanta recibir emails de nuestros lectores / commentaristas / detractores / acosadores / pretendientes / fanes. No sólo historias de chungos, sino sugerencias, proposiciones deshonestas, sueños eróticos o cualquier cosa que no hable de casinos, viagra o alargamiento del penis. (Nos referimos al spam, claro, ¡¡no os cortéis si en vuestro chungo/proposición/sueño erótico hay algo de esto!!).

Bueno, pues el otro día nos llegó una invitación para hablar de blogs en un programa de Radio 3.

Lo primero fue un momento de pánico en el que nos decíamos las unas a las otras “¿Vamos o no vamos?”. Luego pasamos a la etapa “vale, vamos, pero hablas TÚ”. Después decidimos que intentaríamos hablar todas, aunque la Perri ha decidido llevarse la bocina de Harpo Marx para, si no puede, por lo menos dar señales de vida.

Vamos La Perri, Misia y Be (Noa no, podría abrirse una brecha en el continuo espacio/tiempo y ser el fin del universo tan y como lo conocemos), para hablar de este blog. Hablaremos de las posteadoras, de los contenidos y los commentaristas (algo muy muy importante en Quédate A Dormir). Nosotras vamos como representantes de blogs sobre la vida cotidiana, y habrá algunos bloggers muy conocidos en representación de los blogs de noticias, blogs culturales y blogs de música.

Sólo esperamos que no nos entre el síndrome aspirante-a-Miss-España-siendo-preguntada-por-Rusia o el ya clásico por estos lares ataque de panidez (pánico+timidez).

No sabemos si proponeros que nos escuchéis o no, por eso de la presión y el pánico escénico y esas cosas. Además, ¿no es mejor conservar el misterio? Casi mejor lo decidís vosotros solos… El programa se llama Red Babel, y se emite en Radio 3 los sábados por la mañana de 10 a 12. Nosotros estaremos este sábado, es decir, mañana…

Y queremos pediros ayuda para una cosa: nos han dicho que llevemos un par de posts de cada una para leerlos en antena ¡y no sabemos qué elegir! Después de un año y pico de blog y casi 350 entradas es difícil.

¿Qué posts os han gustado más? ¿Hay alguno que creáis que nos define como blog? ¿Recordáis alguno que caracterice especialmente a alguna de estas blogueras? ¿Cuál os molaría oír contado por su propia autora?

Terminamos este post escrito a muchas manos y nos quedamos esperando vuestra ayuda. Nos leemos o nos escuchamos pronto.

La Perri, Misia y Be.

jueves, octubre 04, 2007

¿Adiós mundo cruel?

Quizá hayan notado que últimamente estamos posteando un poquito menos de lo habitual. Misia ya les dio una pista de lo que le sucede. Por mi parte resulta que Parker se casó el viernes y está de viaje de novios por el mundo en plan lujo total. A consecuencia de su ausencia y lo limitado del equipo, desde hace semana y media mi trabajo se ha multiplicado por dos, y con él mi grado de agotamiento y estrés.

El caso es que anoche salí de la radio hecha papilla e hice lo que suelo hacer todas las noches. Por este orden:

1. llamo al ascensor (la redacción está en una planta 10),
2. el ascensor llega y yo entro,
3. pulso el botón de bajada y
4. me miro en el espejo (más que nada para comprobar mi cara de cansada y cabreada).

Pues anoche en lugar de mis ojeras me encontré con lo siguiente:

Estupendo. ¿Qué quiere decir que un ascensor no funciona correctamente? ¿Que en vez de bajar, sube y en vez de subir, baja? ¿Que indica séptimo piso pero en realidad estás en el tercero? ¿Que cae a plomo? ¿Que voy a morir?

¿Y qué hago? ¿Me bajo? Las puertas ya se han cerrado... ¿Le doy a todos los botones y me apeo en cuanto se abran las puertas? ¿Rezo? ¿Llamo a mi madre para despedirme? ¿Llamo a mi amó para que cancele los billetes para el fin de semana?

Al final me encomendé a Antoñita y no pasó nada. Pero creo sinceramente que tras 7 meses de atasco diario en el edificio mientras renovaban los cuatro ascensores, tras mes y medio sin ascensor en casa porque les dio por cambiarlo en agosto... esto es una crueldad innecesaria e inmerecida por parte de los dioses de los elevadores, a los que yo he ofrecido tantos y tantos momentos felices.

miércoles, octubre 03, 2007

La tienda inquietante

El otoño me pone triste. Es inevitable, cada año por esta época viene la ola de pena y… ¡zas! Triste.

Madrid se vuelve gris, el sol empieza a durar menos y yo me pongo melancólica y me dan ganas de escuchar canciones bonitas y tristes en francés. En esos momentos (estos) tengo que andar con cuidado, porque estoy hipersensible. Sólo leo libros bonitos y sólo veo pelis si me aseguran que van a acabar bien.

Y así andaba yo por la Gran Vía, con cuidado, intentando escapar de la ola mientras tarareaba “Le temps de vivre”, cuando pasé por ese agujero negro de la felicidad que es…

¡TAPICERÍAS PEÑA!


Tapicerías “PENA” para los hipersensibles y gente con buena vista en general.

Háganme caso: es como los dementores pero a lo bestia. Veamos… ¿qué se puede uno encontrar en esta tienda? Echemos un vistazo al escaparate:


Más cerca...


Sí, amigos, han visto bien. En Tapicerías Pena podemos encontrar cosas como ésta...


...ésta...


...ésta...


...o ésta...


¿No es inquietante, perturbador y casi traumatizante? ¿Los hacen personalizados si les llevas una foto de tu perro muerto? ¿Salen los bichos de los cojines por la noche para jugar? ¿Si los miras fijo te persiguen hasta comerse tu alma para que nunca más seas feliz?

Estamos en octubre y hay muchos seres oscuros vagando por ahí para que la ola de pena prevalezca. Amigos, tengan cuidado ahí fuera.