MANAZAS

Yo, Be, me he cargado la plantilla milenaria de QaD por torpe y con un solo clic. Me autoflagelo ante mis copropietarias y me comprometo a dejarla lo más parecida posible, si no mejor. ¡Palabra!

lunes, mayo 23, 2011

Con tiroides y a lo loco

Como conté en el post anterior, he estado últimamente un poco pocha. Después de estar durante meses muy cansada y no tirar de mi cuerpo decidí ir mi médico, que me mandó unos análisis. A la siguiente visita, ya con resultados, me miró, miró mis análisis, chasqueó la lengua y me dijo que tenía el tiroides descontrolaíto del todo. Empezó a preguntarme si tenía otros síntomas, aparte del cansancio y yo dije que no.

Ja.

Ella me empezó a preguntar:

- ¿Nervios alterados e hiperactivación?

- Sí , pero pensaba que era el estrés del trabajo.

- ¿Irritabilidad y cambio de carácter?

- Sí, pero pensé que era por los alumnos.

- ¿Insomnio?

- Sí, pero pensé que era el estrés.

- ¿Estás adelgazando?

- No, la verdad es que estoy estable... y ahora que lo pienso, es muy raro: últimamente me he dado a la mala vida de la comida basura. Y además como en cantidades industriales. La verdad es que es raro que no me haya puesto como una foca, ahora que lo pienso.

- ¿Palpitaciones?

- No. Bueno, no sé, ¿eso qué es exactamente?

- Sentir latir el corazón fuerte.

- Ah, pues entonces sí. ¿Eso no es normal?

- NO. NO ES NORMAL. ¿Temblor de manos?

- Sí, pero yo es que tengo mal pulso... siempre supe que cirujana, como mi padre y mi hermano, no iba a ser... - me hizo extender las manos y me puso una hoja de papel encima: la hoja se meneaba como las caderas de Shakira.

- Te voy a medir el pulso... ¡vaya! ¡100 pulsaciones por minuto en reposo! Sólo una pregunta... ¿desde cuándo llevas así?

Ni me acuerdo. Quizás desde hace un año, con las oposiciones. Pensé que era normal estar estresada y cansada: ¡estaba de oposiciones! aunque es verdad que de otoño hasta ahora he ido empeorando.

Total, que salí de la médico con una cita para la especialista, una receta de tranquilizantes (de la que pasé ampliamente) y la prohibición de hacer cualquier deporte ("¡mira tus pulsaciones! ¡ni se te ocurra moverte mucho ni hacer nada de deporte! tal y como llevas el corazón, te puede dar un colapso") y un acojonamiento en el cuerpo importante.

Así que he estado los últimos meses de médicos, pruebas y tratamiento y ya estoy mucho mejor. Por una parte muy cabreada conmigo misma: ¿cómo mi cuerpo me pudo dar tantas señales y yo ni darme cuenta de que algo iba mal hasta mucho después?¿cómo podía estar tan alterada e histérica y parecerme normal? parece que con nuestro estilo de vida, todo se lo podemos achacar al estrés y eso lo disculpa todo, como si fuera normal. Y que nos zurzan si vamos renqueando por la vida. Por otra parte estoy sorprendida: he estado con unos picos hormonales impresionantes y, aunque he perdido a veces la paciencia antes de lo que yo lo suelo hacer, ¡he tenido el suficiente autocontrol como para no comerme a ningún niño! ¡y mi marido no se ha divorciado de mí! (el pobre es un bendito, ha aguantado a una señora esposa espídica total pero hecha un muermazo por el dichoso cansancio).

Ahora que el tratamiento está funcionando, he descubierto de nuevo la paz interior y una Misia zen da las clases. Los alumnos flipan: "profe, estás muy rara. No gritas ni aunque nos portemos mal. ¿Te pasa algo?". Yo me río y continúo dando mi clase. Sospecho que mis alumnos creen que me doy a las drogas antes de entrar en el aula. Y estoy contenta, por fin me encuentro bien, como siempre, ya no estoy tan cansada y además he podido volver a hacer deporte (el primer día que volví a la piscina y le conté esto al monitor se asustó un poco. Y para asustarle más le solté un "bueno, y si me da un patatús en la piscina no pasa nada: te tiras y me sacas. Me da igual que hayas acabado de comer ¿eh?". Justa venganza por lo del huevo).

Lo que tengo claro es que después esta enfermedad y su tratamiento me voy a convertir en una superheroína, porque, de una manera u otra, voy a sacar un superpoder:

- Por el tratamiento estoy engordando a marchas forzadas. No me está sirviendo ni la dieta ni la vuelta al ejercicio. A este paso, me convertiré en la mujer hipopótamo y podré detener a los malos aplastándoles bajo mi peso.

- Si esto me rebrota, me tendrán que meter en el cuerpo yodo radiactivo para dejarme totalmente KO el tiroides. A mí me parece que es como matar moscas a cañonazos, pero qué c*ño... ¡yodo radioactivo! ¡la materia de la que están hechos los superhéroes! a lo mejor la radioactividad se combina con el cetro de la cursilidad y mi superpoder será hacer que los malos lloren cuando vean anuncios de niños bailando y perritos envueltos en papel higiénico.

En fin. Sea como sea, Speedygirl, ya me puedes ir haciendo un hueco en tu troupe de superhéroes. Vamos a armar una que los X-men se van a quedar a la altura del betún.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Te entiendo perfectamente porque yo pasé por lo mismo... Lo único que yo lo descubrí demasiado tarde y me quedé sola, en parte, por culpa de esta enfermedad...
Ahora ya pasé un año con las pastillas y las he dejado de tomar, dentro de 3 meses revisión, si estoy bien, no tomaré el yodo :) (q no me gusta nada la idea, es joder algo de la forma contraria a la que la tienes, pero al final sigues jodida...)
Muchos ánimos y ten paciencia y vuelve a tu paz interior, que se nota, vaya que si se nota...
Un beso.

quelitas dijo...

PUes ese sería un superpoder molón!! a más de uno le haría falta un encontronazo con "cursigirl"!!!

Besos y ánimo!!!

Bruja Naranja dijo...

Estamos tan acostumbrados a encontrarnos mal que no le damos importancia a las tropecientas señales que nos envía el cuerpo.
Por suerte han dado con la causa y tiene tratamiento (esperemos que no sea enviarte a Japón). Cuídate.

Speedygirl dijo...

Yodo radioactivo... ¡genial! Los superhéroes con yodo radioactivo interno son los más divertidos... Te esperamos impacientes, irse de cañas con los X-Men va ser más divertido que nunca... XDDDDDDDDDD (Y mientras tantos cuídate mucho mucho mucho mucho, ¿eh, pequeñaja? UN BESO ENOOOOOOORME!)

_Xisca_ dijo...

Vaya, pues es lo que pensaba, lo mismo que mi madre. Espero que el tratamiento te vaya bien y el yodo no sea necesario, besos!!

Misia dijo...

Anónimo, jo, pues ánimo. ¡Suerte y que no te tengan que endosar el yodo! y sí, parece mentira pero... qué cambio. Qué paz.

Quelitas, jaja, ¡que se me acercara un chulito piscinas!

Bruja Naranja, ¡yo misma seré una pequeña Fukushima! parece ser que después del tratamiento tienes que estar aislado unas semanitas :O

Speedy, gracias por el huequito en el olimpo superheroico. Unas cañas pronto con o sin superpoderes, ¿eh?

Xisca, eso espero. Pero vamos, que me han dicho que esto lo puede volver a desencadenar otro pico de estrés. ¿y qué tengo yo dentro de un año? ¡oposiciones again! yupi. O algo. Tendré que aprender a tomarme las cosas de otra manera.

JuanRa Diablo dijo...

Yo sí que notaba que refunfuñabas mucho cuando me quedaba a dormir en el sofá pero lo achacaba a que no te gusta que ponga los zapatos encima :P
Es curioso cómo terminamos acostumbrándonos a no estar a pleno rendimiento y llegar a verlo como algo normal. Mi hermano tenía diabetes sin saberlo y encontrándose mal no era realmente consciente de que eso no era normal. Solo dos meses después de saberlo y tratándose y cuidándose se siente como nunca. Y también dice como tú: ¿Cómo he tardado tanto en percatarme de que algo fallaba?
En fin, celebro que estés mejor.
PD. Repartiros la Humanidad entre Speedy y tú, que luego todo son líos de territorialidad.

Lenka dijo...

Yo también tengo jodía la tiroides y, además, me duele todo el cuerpo desde hace años sin que nadie sepa por qué razón. Tampoco es que los médicos se hayan molestado nunca en averiguarlo, la verdad. Llevo con dolores musculares y articulares así como 17 años, pero no he conseguido que me hagan ni una radiografía. Así que sí, te acostumbras a estar mal. Qué remedio! Me alegro mucho de que en tu caso hayan dado con la razón.

Unknown dijo...

Estoy en las mismas, tomo 9 pastillas diarias, pero afortunadamente no he subido de peso. No estas sola en esta lucha. Saludos.