Quise entrar en la tienda porque había visto en el escaparate unos pendientes muy chulos (soy fan de los pendientes... tengo más de cuarenta pares) y di un par de golpecitos en la puerta de cristal. Es una tienda pequeñita, de las que cierran el pestillo para controlar quién entra y sale. Dentro había cinco señoras apiñadas, dos dependientas y un niño.
Nadie se dio cuenta de que yo estaba llamando a la puerta, excepto el niño, un mocoso de unos cinco años con cara de ser la reencarnación del Satán Niño. Se acercó a la puerta acristalada y empezó a hacerme burla y a hacerme gestos con los puñitos y la cara para que me fuera. Después, me sacó la lengua. Y no la metió después en la boquita, no, sino que con gran parsimonia y devoción, fue recorriendo con ella de lado a lado la puerta acristalada, hasta cuatro veces, dejando un rastro de babas que no podría haber sido producido ni por doscientos caracoles a pleno rendimiento.
Horrorizada, empecé yo a hacerle gestos, diciéndole "no" con la cabeza y la mano. Hasta que levanté la cabeza y vi que todas las señoras de la tienda me miraban con cara de espanto. Todas menos una: la sujeto identificada como madre, que me miraba peor, con cara de profunda indignación.
Por fin, la dependienta se adelantó, me abrió la puerta y pude pasar, mientras todas ellas me miraban como si fuera yo Herodes hecho mujer. La cara de la madre había pasado al odio (¿esta pava le estaba diciendo "no" a mi niño?), así que me vi obligada a dar explicaciones:
- Es que estaba lamiendo el cristal y lo estaba poniendo perdido... además, se le va a caer la lengua a cachos. Pero vamos, que a mí me da igual- y me encogí de hombros. Desde luego no eran mi público más entregado. Algunas miraron el rastro baboso, que ya chorreaba y que parecía pegamento imedio más que babas (prueba de que ese niño era reencarnación de bicho malo... y si se le hubiera caído la lengua, al cabo de dos meses se le habría regenerado sin problemas. Bicho malo, lo dicho).
A pesar de todo, la madre me siguió mirando mal. Seguramente, porque no le sentó bien que alguien contradijera a su hijito adorado. Si no lo hacía ella, desde luego no iba a venir una extraña a hacerlo.
Aunque quizás me miraba mal porque realmente pretendía que a su niño horrible se le cayera la lengua de verdad y la dejara en paz.
P.D. No me ha tocado el gordo, pero sí 100 euros... ¡yupi! (a repartir con Hermano y Novia de Hermano). Jijiji.
12 comentarios:
Ah! pero es verdad que a alguien le cae? yo creía que era una leyenda urbana!
¡¡NO A LAS NAVIDADES BLANCAS!!
O al menos que se hable de sexo con tranquilidad y buenos alimentos, sin guarreridas españolas, como en el último post subido aquí www.quejosodelafortuna.blogspot.com
Yo entregué a mi jefa 5 € en concepto de "lotería de la empresa", y estoy esperando que me de participación o algo, o que me diga el número que juego por lo menos.
Pero nada, oyes.
Si cuando llegue al curro la jefa no está, sabré que "nos" ha tocado.
Felices fiestas a todos!
Que hartura de fiestas!
Y eso que noo han hecho más que empezar!
Habría que instituir un premio al spam más... más algo.
Ah, si; niños...
La última vez que un niño me hizo eso atravesé el cristal con mi puño, le saqué del establecimiento por el pescuezo, le arranqué la cabeza y me cagué en ella.
Y la gente me miraba con desaprobación, en plan de "jo, qué poco espíritu navideño"...
Tou (aka Rey Herodes), me encanta el post, cargado de espíritu antinavideño. Te voy a regalar bastones de caramelo de esos a rayas, para compensar.
La saliva de los hijos de satán no sólo es antiséptica sino radiactiva.
Mañana la puerta cobrara vida y saldrá por la noche a alimentarse de blogueras con pendientes.
Esto es así y quien lo dude conocerá las consecuencias.
Hmmm.
Siempre nos quedará el consuelo de que todos estos padres que educan «tan bien» a sus retoños acabarán por ser abandonados en una gasolinera cualquier verano de estos... ^_^
Salud.
Mísia no te ralles. Que tu se lo decías con buena intención y si la señora no se da cuenta pues a lo mejor por eso está criando un monstruo en vez de un niño.
Feliz navidad.
constreñidos por la censura.
No nos dejan ya hablar aqui de s***.
s***
*e**
**x*
****
huy casi, a ver con f***** y f******. Hummmmm. ¿Hacer el amor?
;-P
Ahora si feliz navidad.
Ya decía yo que tanto post de resfriados tenía su sentido...
¡¡NO A LAS BLANCAS NAVIDADES, COMO DICEN ARRIBA!!
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