Un horror. Sí, ya lo sabíamos, pero no por anunciado el horror es menos horroroso.
La parte de Oxford, mi preferida de la novela (¡amo tanto a Aloysius!) junto con el principio de Brideshead, parece más bien Fuera de Onda.
Y la de Brideshead… todo es muy bonito, pero le falta exceso, saturación, complejidad. Precioso, pero no trasmite nada. Cero emoción.
Venga, va, que os pongo el trailer para que compartáis mi suplicio (lo pongo en inglés porque el doblaje en español NO SIGNIFICA LO MISMO).
Los actores están flojos y los personajes simples y vacíos. Charles Ryder (Matthew Goode) se pasa la peli poniendo caras de "como me molo" y no trasmite pero nada. En un par de ocasiones hace una cosa con los ojos que quizá quiera decir que lo que ve le gusta mucho, o quizá no. No se entiende qué le mueve, qué quiere, qué siente por Sebastián, por Julia, por Brideshead. Tampoco se entiende qué quiere que parezca que siente. Lo que sí se entiende es que está encantado de lo bien que le sientan el tweed y los jerseys de pico. En fin, chaval, que te vayas a hacer de Ozymandias a ver si se te da mejor.
Julia… de Julia (Hayley Atwell) me quedo con su(s) peinado(s), con sus vestidos, kimonos, sombrillas, con su maquillaje y ya. Y de Lady Marchmain (Emma Thompson, que mira que me suele encantar) pues nada porque aquí está sosísima.
Sebastián (Ben Whishaw) se salva, sí, pero es que quiero tanto a este personaje que me molaría hasta interpretado por Chus Lampreave. Los amigos de Sebastián, a.k.a. Los Sodomitas, aparecen como un grupúsculo borroso dibujado con súperpoco cariño. Y se merecían algo mejor.
Pero la culpa no es de los actores. La culpa la tiene Julian Jarrold, el director que, en la más pura escuela Al Salir de Clase, los quería simplemente poniendo caras. Y claro, ni las caras ni la caca de guión explican a Charles y Sebastián. Ni a Charles y Julia. Su historia no tiene ni pies ni cabeza, parece Titanic.
Los Marchmain van de gilipollas a meapilas. No se entiende por qué cada uno hace lo que hace (en el caso de la decisión final de Julia es que no tiene ni pies ni cabeza), parece que simplemente dan bandazos con Dios en la cabeza.
La tortuga enjoyada cuya única misión era producir una cierta repulsión por el exceso, se debate entre cutre y poco efectiva. Y encima Aloysius sale poquísimo y eso no se le puede perdonar.
A esta película, señores, le falta exceso. Le falta barroquismo. Le falta decadencia. Este Brideshead no es Brideshead. A las dos horas llega el final de la peli y yo sin haberme emocionado ni un poquito.
Pero como ya no es octubre y he decidido ser positiva, he encontrado dos cosas que salvar: 1. La escena de la cata de vinos en la entrada de Brideshead. 2. Que me voy a volver a leer la novela, a ver si soy yo que recuerdo una historia totalmente diferente… Ah, y 3. Sale una tiara.
13 comentarios:
Pues yo creo que la veré porque no conocía la historia y así luego la serie y la novela me gustarán aún más,jeje.
:)
te torturas a tí misma (como cuando fui a ver El amor en tiempos del cólera y me tiré toda la película echando espuma por la boca cada vez que cantaba Shakira)
besitos mil
Bueno Be, no me negarás que de vez en cuando una buena terapia de cabrearse contra algo y poder soltar sapos y culebras sienta muy bien, ¿no?
Ah! y tranquila, solo es una peliculita, el libro original siempre estará ahí para ser redescubierto cuando quieras.
Ana-ónima
Creo que es la palabra «tiara» la que me anima a comentar.
Hayquever.
Y ya. Es una pena, porque parece que se han gastado un pastón.
¿Te la has leído en inglés? Lo digo por saber cuánto trabajo me va a costar.
Eh eh ¡EH! Que vale que sea un bodrio (¿no te lo veias venir?), pero MUCHO cuidadín de meterse con Titanic, hombrepordiso.
(que hay por ahí gente a quienes les gustó Yayo Jones y La Calavera de Iker Jiménez, y no me gusta señala-aaaar...)
Gracias, Be, me has ahorrado una cola...
Missmole, claro que sí, eso de "no vayas" es sólo por el juego de palabras. Yo soy muy partidaria de ver las pelis una misma.
Heike, jijiji. Pero es una tortura rica, ¡mola hacer trabajar el bate depurpurina de vez en cuando!
Ana-ónima, claro que sí. Es un buen ejercicio y deahoga mogollón.
Ephedro, sí, me la leí en inglés. No la recuerdo especialmente complicada, la verdad, pero tampoco recuerdo que el argumento se pareciera a lo que vi ayer, así que puede que todo sea una ilusión... (¿tendré que poner "tiara" más veces?)
E.Martin, ¡no me digas que eres fan de Titanic! Al menos eres suficientemente listo como para no considerarlo un placer culpable.
Bosco, mírame creando opinión. Ahora sólo falta que los expertos en cine del mundo mundial internetero me escriban una carta/email/comment terrible que no me deje dormir por las noches...
Como dicen en latinoamérica:
"Se los advertí"
Jajajaj, en lugar de la etiqueta "recomendaciones" debieras haber puesto la de "advertencias", ;D
Juanra Diablo, desde luego no me puedo quejar de no habérmelo olido.
Gatito, jajajaja! La verdad es que pega más. Estoy fatal, ¡el otro día me recomendaron comprarme un saco de boxeo!
No, lo que te recomendaron es buscarte alternativas a la agresión física hacia los que aún se consideran amigos tuyos.
Ya está el niño intolerante metiéndose con las opciones de ocio de los demás. Aguafiestas.
¿"Titanic" y "placer culpable" en la misma frase?
/me guarda el bate de beisbol en su caja
/me le quita la funda a la sierra mecánica
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