MANAZAS

Yo, Be, me he cargado la plantilla milenaria de QaD por torpe y con un solo clic. Me autoflagelo ante mis copropietarias y me comprometo a dejarla lo más parecida posible, si no mejor. ¡Palabra!

martes, septiembre 12, 2006

Peligro: madre a la vista

Mañana mi madre cogerá su maleta, abandonará s´illa y vendrá a casa a hacer una visita a sus dos descastados hijos (sí, esos que después de acabar la carrera decidieron quedarse en Madrid y no volver al nido familiar).
Antes de nada, debo aclarar que yo me llevo muy, muy bien con mis padres. Pero tener a mi madre en casa es un poco estresante. En casa de Palma, todo funciona como un reloj, todo está impoluto y perfecto. Mi madre trabaja sus ocho horas diarias, se ocupa de la casa y antes nos cuidaba a nosotros (como nos marchamos, mi madre nos sustituyó por un perro. Pero eso es otra historia). Y me maravilla, porque cuando yo me fui a vivir sola, los primeros meses todo fue el caos, hasta que aprendí a manejarme, a cocinar, a saber que las plantas se mueren si no se les echa agüita (regar, creo que se llama). Ahora mi hermano y yo nos repartimos las tareas y la casa sobrevive en un umbral de limpieza y orden aceptable.
El problema es cuando se produce la colisión madre-nuestra casa. Al principio siempre nos pillaba desprevenidos y recuerdo algún momento en el que yo corrí por los armarios de la casa escondiendo montones de ropa por planchar mientras ella subía las escaleras. Ahora somos más viejos y más listos y para amortiguar el impacto, antes de cada visita mi hermano y yo hacemos dos cosas para evitar las broncas:
1) Comernos la comida del congelador. Pero no toda. Hay que buscar el equilibrio: si hay mucha, ella se enfada porque lo que ella congeló la otra vez sigue allí, no nos hemos alimentado y además no tiene sitio para congelar la nueva remesa de sopa y lentejas. Si hay poca comida, ella se enfada porque no tenemos con qué alimentarnos y porque no compramos lo suficiente. ¿Dónde está el equilibrio? ah, quien sabe. Depende de ¿la dirección del vuelo de los estorninos? Intuyo que la clave está en la palabra "alimentación", pero no le encuentro yo el punto al asunto.
2) Hacemos una maratón de limpieza que comienza dos días antes de su llegada. Con plancha (ay) incluída.
Pero sabemos que por mucho que hagamos, NUNCA estará todo perfecto. SIEMPRE fallará algo. Así que yo ya me tomo sus visitas con mucha filosofía: con mi madre no aspiro a la excelencia, tan solo a la corrección.
Lo malo es que esta visita amenaza con ser más caótica que las demás porque este mes tengo un montón de trabajo y no estoy mucho en casa, unido a que me he pasado el fin de semana dormitando en la terraza de Be y esta noche de cañitas. ¿Resultado? Es tarde, mi cuarto necesita un buen repaso, tengo la reproducción del Everest hecho con camisetas y pantalones por planchar sobre la cama y tengo que preparar su habitación. Por no hablar del congelador: para que alcanzara un nivel aceptable de ocupación, tendría que comerme esta noche siete filetes de pollo, dos de ternera, cuatro lenguados, dos tupper de sopa y una bolsa y media de guisantes (¿veis? helado no queda. Es injusto. Y yo que estaba dispuesta a comérmelo para evitar el enfado de mi madre...)
(Pensándolo bien, creo que mañana me quedaré en mi trabajo... a dormir, y a pasar el miércoles... y el jueves... este... ¿cuándo se irá mi madre?)

17 comentarios:

Be dijo...

Misi, pilla una bolsa térmica y lo traes todo a mi nevera. Total, nos lo vamos a comer en un par de fines de semana...

Anónimo dijo...

Briconsejo Malvado de hoy: las madres nos van a dar su opinion sobre como hemos de ocuparnos de la casa, amueblarnos, vestirnos. Da igual lo que hagas, ella encontrara la pega. La solucion; hacer de tripas corazon e ignorarla. Respondela con monosilabos cuando te reconvenga sobre tu desempeño domestico, sigue a lo tuyo y no hagas loq ue dice, aunque este delante tuyo. Sigue así hasta que te mencione el hecho de que no la has hecho caso en nada, momento en el cual le sueltas "he escuchado tu opinion pero no estoy de acuerdo y prefiero hacerlo a mi modo"

La reaccion sera, cuanto menos, curiosa. En este momento has de, sin perder la calma, responder a todo lo que diga de nuevo con monosilabos y saltearlo con un "me da igual" donde mas duela. Sin ponerte borde, incluso con cariño, dejale claro que estas segura de que haces muchas cosas mal, pero que prefieres hacer tus cosas mal a tu modo.

Eso si, no te garantizo que tu relaccion con tu madre siga siendo la misma.

lorzagirl dijo...

Las madres son un poco pesadas a veces. Es un pequeño precio que hay que pagar a cambio de lo que realmente nos interesa: los mimitos.

Anónimo dijo...

Pues yo esperaba esas visitas ansioso en mi época de estudiante. Pronto me independizo, tal vez cambie de opinión, les cuento...

Anómalo dijo...

Mr. T says: "trata bien a tu madre".

http://www.youtube.com/watch?v=5eG6FUDUjCw

botcgzwl

Gato dijo...

Aceptación, Misita, aceptación.

En uno de mis viajes a Granada, para verlos, no me acuerdo por qué extraña razón mi madre habló de la posibilidad de que yo volviera a casa. La miré con todo mi amor, y le dije: "Mamá, yo sé que me queréis. Vosotros sabéis que os quiero. ¿Para qué vamos a joder? No podemos vivir juntos, lo sabéis". Mi madre se escoñó de risa. Sabía que tenía la razón. Y disfruta mis visitas por el dulce momento en que me vuelvo a marchar.

Basta con que le digas que estás de coña con cierto nivel de mierda aceptable en la casa... ella se cansará de limpiar y os iréis a la calle a dar una vuelta.

Anónimo dijo...

Mmmm... Yo me he tirado un año y pico fuera de casa y no le he dado la dirección, para evitar visitas.

Mmmm... ¿Sólo a mí me parece una buena idea?

Perlita de Huelga dijo...

Jo, Efe, que lastimica de padres...

Yo creo, Misia, que tu madre quiere que la necesiteis. Os tiene demasiado lejos y aunque tenga un perro, no es lo mismo... ¿Y si la dejais ejercer un poco de madre?

Anónimo dijo...

Está claro que siempre deseamos lo que no tenemos. Tú tienes que aligerar tu congelador porque tu madre viene con nuevas remesas de tuppers, y yo creía que mi madre sería de las que me pasaría ¡un mísero tupper! cuando me fuera de casa. Meses después, a través de una vecina, me hizo llegar... no puedo decirlo... ¡una lasagna congelada! ¡Mi madre, que no ha puesto nada congelado en casa en la vida! Aún me entristezco al recordarlo...

Be dijo...

Resumo mi relación con mi madre en estos meses de independencia: de tapers nada. Pero comemos juntas una vez por semana.

Zagloso dijo...

Y una mañana de noviembre, porque estas cosas pasan siempre en noviembre, la hija rebelde se descubrió espiando el congelador de su propia descendencia...

Anónimo dijo...

Briconsejo: Te sugiero que antes de que venga tu madre veas peliculas como "Volver" y "Solas".Tendras un subidon de amor a tu madre que te permitira soportar el aluvion de comentarios sobre tu piso, tu pelo, tu vida, tus cosas....
Tambien puedes ver algun episodio de "Marco" ;-P.

Misia dijo...

¡Gracias a todos por los consejos y los ánimos!
Cuando he vuelto a casa de trabajar, mi madre no me ha dicho nada de la casa, de la nevera o de la ropa por planchar (anoche me di una buena sesión de plancha y conseguí reducir el Everest a simples Montes de Toledo). Le habrá dado penita verme cansada. Y lo mejor ya ha llegado: mimos y la propuesta de ir de compras el sábado por la tarde. ¡Viva mi madre!

Anónimo dijo...

De anónimo, nada. Soy hermano. Pero da como mogollón de pereza registrarse, inventarse una contraseña, en fin... además, estoy baldado de tanto fregar esta mañana, a tan sólo unas horas de la llegada de nuestra mami. He limpiado hasta la lavadora por fuera. ¿ os acordáis del Blandi-Blue? Pues al parecer una de esas masas pegajosas fue cruelmente abandonada por algún chiquillo sin corazón, y no sé por qué razón, ha
acabado viviendo sobre nuestra lavadora. Algún día, nuestro pequeño blandi-blue se emancipará y le iremos a ver. Pobrecillo, qué paliza se pegará a limpiar...

Gato dijo...

Encantada, hermano de Misia. Has realizado un gran descubrimiento: las cosas que limpian también tienen que limpiarse.

Cuida la hidratación de tu blandiblú... Ahora lo has adoptado

Anónimo dijo...

Perlita, no te creas, me llevo estupendamente con ellos.

Vamos, me ha llevado unos años pero ahora están muy bien educaditos y estoy muy orgulloso de ellos. Mi próximo objetivo es lograr que se vayan de casa a recorrer mundo.

La Antártida, el Congo, Mongolia, Camboya... ¡Hay un mundo ahí fuera!

Perlita de Huelga dijo...

Jajaja espero que no sean como los mios.

-Mary, ¿nos vamos de viaje?- dice Papá de Huelga.

-Vale- responde Mamá de Huelga.

Y se ponen el canal Viajar del Canal Satélite Digital.

Encantada, Hermano de Misia!