MANAZAS

Yo, Be, me he cargado la plantilla milenaria de QaD por torpe y con un solo clic. Me autoflagelo ante mis copropietarias y me comprometo a dejarla lo más parecida posible, si no mejor. ¡Palabra!

miércoles, julio 21, 2010

Living la vida opositora

Por fin han acabado los exámenes de la oposición. Los he aprobado, pero he sacado una nota mediocre que no me valdrá para hacerme con la plaza. Paciencia: a la siguiente, o la siguiente, o a la siguiente, o... la sacaré. Mientras tanto cruzo los dedos para seguir teniendo un buen puesto en la lista de interinos y seguir trabajando este curso.

Los meses anteriores a la oposición y la época de exámenes han sido un horror. Me pongo de los nervios y aflora lo peor de mí, en distintas facetas. Porque estando de oposición, o bajo presión continuada durante un tiempo, una saca los más variados estados de ánimo y ninguno demasiado normal. He oscilado, sin demasiada transición, entre varios estados:

Histerismo: me entraba el nervio y no podía dejar de botar de un lado a otro. Al grito de "¡voy a suspender!" me daba carreritas por el pasillo, se me desbocaba el temblor de piernas, el temblor en el ojo, el nudo en la garganta. Tenía que saltar de la cama después de dar diecisiete mil vueltas sin poder dormir. Mi chico me prohibió terminantemente el café (¡el café! le hice caso... menos algunas tardes en la biblioteca, que sino no había quien estudiara con el calorcito a las cuatro de la tarde). A veces me venía a la cabeza esto. Al hilo del histerismo, llegaba el siguiente estado de ánimo:

El catastrofismo: yo soy exagerada de naturaleza y a ratos un poco pesimista, pero los nervios me lo exacerban. Entre los nervios y el pensamiento negativo, entraba en un bucle "oh, estoy nerviosa, oh, voy a suspender, oh, estoy muy nerviosa, oh, voy a suspender con indignidad y no estaré ni en la lista de interinos. Oh, estoy muy nerviosa. Oh.... VOY A ACABAR EN EL ARROYOOO". Porque sí: en la espiral descendente en mi cabeza todo empeoraba hasta el infinito y más allá y me visualizaba sola (toda mi familia, mi novio y naturalmente la gatina me habrían dejado por ser una inútil) y viviendo debajo de un puente.

Ñoñez: de repente me entraban unos ataques malísimos de ñoñez brutal y acababa llorando por cualquier cosa. No sabéis la de lagrimones que se me han caído con el anuncio dichoso de Pavofrío, por ejemplo. O la hora y pico que me tiré llorando porque rompí la taza favorita de mi chico (sí, el momento torpe ha continuado desde que escribí el post). A veces la ñoñez se me mezclaba con la tristeza y era un apagayvamonos. Insoportable, sobre todo cuando iba por la casa reclamando mimos con voz ñoña. La gatina huía en cuanto oía ese tono lastimero que se me pone. Mi novio no se atrevía a huir (tanto) porque sino podía invocar al siguiente estado de ánimo, la Misia berserker, que era incluso peor.

Cabreo supino: a ratos me entraba la vena berserker y, poseída por la ira, iba dispuesta a morder a todo lo que se me pusiera a mi alcance. Ver la tele conmigo en ese estado era un horror: un chorro de insultos salía de mi boca: "¡pero has visto a ese imbécil! ¡cómo se pueden decir tantas tonterías juntas! se merecería que blablablabla". Mi señor novio iba apartándose a un rinconcito del sofá, se parapetaba tras un muro de cojines por si acaso y me miraba con cara de flipe. Supongo que algo tenía que ver con que todas mis frases acabaran con un "pues se merecería una muerte lenta y dolorosa, a ser posible con despellejamiento incluido".

Al final acabas con la sensación de que vas a tener que llamar a una tropa de psicólogos, a unos cuantos monjes zen o a César Millán para que te equilibren un poco, antes de que el resto de la manada te mande a la mismísima porra. Porque claro, mi manada (novio+gatina) estaba a la expectativa, esperando a ver cómo aparecía yo en ese momento por la puerta, atrincherados en su despacho, ya que la oscilación era rápida e inesperada y más de una vez mi pobre sufridor iba a hacerle un mimo a la Misia ñoña y se encontraba con la Misia berserker. El pobre. Así que ya os podéis imaginar el alivio que ha sido pasar el examen, sobre todo para ellos. Cuando acabé el examen me recibieron por la puerta así:

- Gatina, ¡el ser del inframundo se ha ido y nos han devuelto a Misia!

Los pobres no contaban con que quedaba el segundo examen, la salida de las notas, el periodo de reclamación y la espera de las listas. Urf.

Post-post: Nene, he etiquetado este post como Amor porque está claro que me quieres un montón, me has soportado tan bien... Sorry.

14 comentarios:

Jandrix dijo...

Bufff... y yo que me planteo unas opos para "entidadautonomica" de mi región, que serán en un par de años... No sé si mi querido y mi canix me aguantarán... Que llorando soy la leche, pero cabreada... mejro no lo pienso y hago como que no te he leido...

Por cierto, enhorabuena por aprobar y haber acabado, a ver si son las re-finitivas.

Illuminatus dijo...

Chica, eso me suena pero por mi condición de parado abandonadísimo, sobre todo lo del catastrofismo. Lo peor fue que ayer... ayer lloré... viendo el programa de Juega con nosotros Sésamo. Parecía Robert de Niro en Analyze this con el anuncio de los seguros.

Thyssly dijo...

Te entiendo perfectamente... Por suerte, creo que de esta vez tengo plaza por fin (en Mates casi basta con aprobar). Espero que los hados de los baremos se alíen contigo y consigas plaza esta vez. Y si no, ¡mucho ánimo para la próxima!

Natalia Roberta dijo...

Ais! Si te sirve de consuelo, yo lloré como una magdalena la primera vez que vi el anuncio, y no, no tengo, como tu, nada que jutifique la lloraera...

Speedygirl dijo...

¡AUPA ESA PEDAZO DE OPOSITORA! Venga, que ya se ha pasado, ahora a disfrutar de unas merecidísimas vacaciones.

Versión11 dijo...

Ay Misia, chú, te entiendo tan PERO TAN bien (prueba a estar 4 años en ese estado) que he mirado alrededor mientras le preguntaba angustiada a mi compañera de piso ¿soy como Misia? ¿soy como Misia?
Luego le he preguntado a mi gato ¿soy como Misia?

Después ambos me han respondido que soy peor que tú. Que qué suerte tienen tu gatina y tu legítimo de que hayas acabado ya los exámenes.

Bueno... creo que voy a seguir estudiando.

Ahhhhh.

Gordipé dijo...

¿Y no has pasado por "atomarporculo" la oposición, me voy de birras hasta que el cuerpo aguante, el día antes?

Cat dijo...

Madre mía lo que me suena todo esto!! De verad que yo creo que hay que pasarlo para saber lo que es, los nervios, la histeria, los cambios humor, todo es ABSOLUTAMENTE EXTREMO. Y a una semana del examen no te digo nada.... Eso es toda una catástrofe. ¿Pero sabes qué? Te mando todos los ánimos del mundo. Yo, he conseguido sacarme la opo este año. Y no veas, entonces sí que lloré. Y con mi señora madre no te digo ná, que si me descuido estaba más emocionada que yo. Lo dicho, ánimo!

Misia dijo...

Jandrix, no van a ser las últimas... pero por lo menos hasta dentro de dos años no estaré en este infierno. Ánimo si al final te decides a presentarte: el proceso es un asco pero si se consigue debe ser maravilloso.

Illuminatus, ains. El momento ñoño ataca cuando menos te lo esperas.

Thyssly, ¡ey, enhorabuenaaa! a ver si dentro de dos años (o cuatro o seis) puedo decir yo lo mismo.

Natalia Roberta, ¡es que toca la fibraaaa!

Speedygirl, sí, a ver cuándo me puedo ir de esta ciudad a descansar a otro sitio.

Version10, jajajajajaja. Mucho ánimo.

Gordi, estoy intentando acordarme de qué hice la noche antes del primer examen y no me acuerdo (¡memoria selectiva!). Eso sí, antes del segundo examen nos dimos una sesión de tercera temporada de The Wire. Fromlosttotheriver.

Cat, ¡enhorabuena! qué gustazo. Tengo muchas ganas de que llegue ese día de sacarme la plaza por la tranquilidad, pero sobre todo para no tener que pasar por esto otra vez.

missmole dijo...

Jo, por algo nunca he querido plantearme la posibilidad de presentarme a unas oposiciones!!!!

Soy una cobarde y no podría pegarme esa panzada a trabajar sin garantía de éxito.

Mucha suerte a ver si te toca plaza esta vez y si no para la próxima!!

Adalias dijo...

Ainns te entiendo perfectamente...todavía recuerdo esos momentos andando sola por la calle, y recitándome los temas..o viendo un número cualquiera (el de un autobús, un portal, una matricula) y pensar que tema se corresponde con el número..

Mucho ánimo y mucha suerte!!!!

Lileth dijo...

No hay duda, has opositado.

Misia dijo...

Miss Mole, supongo que a la larga merece la pena... pero el proceso es duro.

Adalias, jejejeje, post inspirado by...

Lileth, ¡sin duda!

Perri M. dijo...

A mi me dio por engancharme a HOMBRES, MUJERES Y VICERVERSA. No lo podía evitar, me encantaba verlo, creo que me relajaba del estudio. No lo se...pero ¡¡ya me vale!!